Si la Revolución es uno de los emblemas de Cuba y si es un proceso único y continuado, como afirman los historiadores, es pertinente colocar en el paisaje de sus fuegos uno muy particular: el de los tabacos. Para la enorme obra unitaria de José Martí fue imprescindible el aporte de tabaqueros emigrados que, sin convertirse necesariamente en guerreros mambises, fueron decisivos en el aliento de un ejército de barbudos que un siglo después entraron triunfales a La Habana «armados» hasta los dientes… con recios habanos.
El habano no es solo asunto interno cubano. Su relevancia es tal que el mismísimo John F. Kennedy no dispuso el bloqueo a la Isla hasta tanto sus colaboradores no habían nutrido sus humidores presidenciales con una respetable reserva de este producto especial salido de las manos «del enemigo» a cercar.
Tales pasajes pudieron, o no, ser referidos a los 2 000 delegados internacionales del recién concluido XIX Festival del Habano cuando visitaron las legendarias vegas de Vueltabajo —en la occidental provincia cubana de Pinar del Río— y las fábricas H. Upmann y La Corona, en la capital cubana, pero lo que sin dudas saben cada uno de ellos, ya de vuelta en casa, es que el tabaco es mucho más que un disfrute individual y efímero. En Cuba, es una línea cimera en el libro de la identidad nacional.
En la H. Upmann, por ejemplo, trabajó por 19 años como torcedor Compay Segundo, hasta su muerte uno de los trovadores más longevos del mundo y un embajador constante del mejor tabaco jamás producido.
Y de La Corona, que este año presentó la línea Petit Royales, de Romeo y Julieta, salen además otros clásicos del fumador: Hoyo de Monterrey, Cohíba, Montecristo y Partagás. Solo de escribir sus nombres se siente el aroma.
Participantes de 50 países apreciaron la complicidad entre tabaco y cultura en la obra «Rinoceronte romántico», el precioso humidor de plata y cedro confeccionado por el Premio Nacional de Artes Plásticas cubano Roberto Fabelo ganado, en una puja que ganó el empresario español Luciano Méndez, el director en Cuba del Banco Sabadell que hace un año se hizo de otra maravilla parecida firmada por el mismo artista. Coleccionista de arte cubano, el amigo está feliz con la pieza y con la simbiosis que ella representa.
Entre el 27 de febrero y el 3 de marzo los interesados en el encuentro tuvieron simplemente que leer y seguir en La Habana estas señales de humo y olores. Desde la noche de bienvenida, dedicada a la más que centenaria H. Upmann y a su Gran reserva Cosecha 2011, a otra velada para honrar a la Quai D’Orsay y la gala a la medida de Montecristo, la marca que al cierre del evento presentó una nueva línea exquisita —valga aquí la redundancia— llamada 1935, el festival fue eso: una fiesta.
La Corporación Habanos S.A., líder mundial en comercialización de puros Premium —hechos totalmente a mano— tiene, como su red de obreros en la base, manos sensibles, y las usa para intercambiar afectos y hacer negocios con 27 marcas cubanas muy apreciadas porque respetan normas de confección bicentenarias en las vegas y tabaquerías de una Isla con clima privilegiado para este producto.
La especial promoción del Cohíba, que en 2016 cumplió 50 años como marca, fue esencial en tales saldos. Dicho sea de paso, el Cohíba robusto fue el puro cubano más fumado en el mundo el año pasado, un período en que mercados sólidos como España, Francia, Alemania y Reino Unido se recuperaron, mientras otros emergentes —China no puede faltar— apuestan por una bocanada en las compras.
El crecimiento de 13 por ciento en la recepción de turistas en Cuba, que completó por primera vez los cuatro millones de visitantes, permitió que la propia Isla se convirtiera en el quinto mejor mercado, de ahí que, frente a las perspectivas de arribos aun mayores, la agricultura y las fábricas se preparan para superiores exigencias de mercado.
En ejemplar conjunción de productos líderes, la Corporación Havana Club Internacional S.A. presentó en el Festival del Habano un nuevo ron: Tributo 2017, que continúa la serie anual limitada, perseguida en todo el mundo. Esta vez, se trata solo de 2 500 botellas de una bebida ambarina que maestros roneros confeccionaron a partir de añejas reservas de aguardiente de caña, de modo que saborear una sola línea de este tributo al paladar puede ser como disfrutar un folio largo y sublime.
Hubo mucho, y bueno, en el XIX Festival del Habano. Antes de la proclamación de los premios de la Feria comercial y de los Premios Habanos 2016 —que resumimos en un recuadro al final— Inocente Núñez, el copresidente de Habanos S.A., agradeció la alta participación e invitó a celebrar, en 2018, veinte ediciones de esta fiesta.
En todo el planeta, es larga la lista de ilustres que aclararon ideas o compartieron afectos al calor de un habano. Se sabe que Winston Churchill decía llevar siempre parte de Cuba en los labios y que a menudo Freud meditaba bajo el criollísimo humo. Se cuenta que Víctor Hugo, Byron y Balzac gustaban de estas «cachadas» y que los mismísimos Einstein y Edison hacían quién sabe qué análisis personales sumergidos en tranquila fuma.
Se recoge que Chaplin y Groucho Marx —este último la llevó consigo a la pantalla— tenían esta afición. Es larga la lista, pero una estampa tal vez pudiera resumirla: alguna vez, el actor Jack Nicholson estuvo en Cuba y, según refieren las crónicas callejeras, no salía de la Casa del Habano de Partagás. Seguramente en la intimidad —lejos de un gran hotel de ficción que marcó su trayectoria artística— el ícono de Hollywood encontró el especial «resplandor» del habano cubano.
Premios Habanos 2016:
Categoría Comunicación: al periodista, escritor y colaborador de la revista Cigar Aficionado, Gordon Mott.
Categoría Negocios: a Edward Sahakian, por el desarrollo del habano en Reino Unido.
Categoría Producción: Josefa Acosta, por sus más de 60 años en la industria tabacalera cubana.
Premios de la feria Comercial:
Premio en Mejor diseño libre de stand: BrasCuba S.A.
Menciones en Mejor diseño libre de stand: Internacional Cubana de Tabaco S.A.; La Bodeguita del Medio y el Floridita, de Palmares S.A. y Havana Club International S.A.
Premio en Mejor diseño de stand modular: BONGHA ITALIA.
Premio al stand más visitado: Grupo Corporativo Cimex Cuba.
Menciones al stand más visitado: Comercial Iberoamericana de Cohíba España y Cuba Ron.
Premio de Comunicación integral: Havana Club International S.A.
Premio en el XVI Concurso internacional Habanosommelier: Felipe Rojas, de Chile.