Pablo Valenzuela está contento. Las horas no le sobran y menos cuando un gran proyecto reclama su atención, sin embargo, para un Café con EBM sacó un ratico. Al representante de Cuex S.A , empresa experta en el tema ferretero en Cuba, se le nota sobre todo, su conocimiento en torno a un país que ha sido la apuesta de la empresa por veinticinco años.
En medio de los miles de temas que le rondan, la seguridad de su voz también presume la experiencia en el mercado que celebran, porque como dice: “Veinticinco años no se cumplen todos los días”. Sonríe.
“Cuex comenzó como empresa de materiales eléctricos, pero hemos ido creciendo con nuevos proveedores y nuevas líneas que no han llevado a nuevos clientes. Con veinticinco años en el mercado, somos una empresa bastante consolidada en el tema ferretero… lo nuestro es ferretería, materiales de la construcción”, apunta satisfecho.
Su oficina en el Centro de Negocios de Miramar deja claro la especialidad de la empresa y el pequeño cubículo donde huele a café y a reposo, aunque sea por un breve tiempo, demuestra esa larga trayectoria en la isla colmada de premios y reconocimientos.
Hoy son distribuidores exclusivos de varios fabricantes europeos, también de México y ello les ha permitido ampliar sus líneas de trabajo con único objetivo: Continuar construyendo sueños.
“No nos podemos quejar. Los cliente estás satisfechos con nuestro trabajo lo que no significa que podemos relajarnos y dormirnos en los laureles, sino seguimos desarrollando nuevas líneas”, dice Pablo.
La huella de Cuex en sus especialidades está en sitios emblemáticos como la imagen de Camilo Cienfuegos en La Plaza de la Revolución, el monumento al Che en Santa Clara, en las escuelas de trabajadores sociales en Holguín y Santa Clara… obras sociales que llenan de satisfacción al equipo y hacen que la mirada de Pablo vuelva a los días febriles en que cada una se hacía, gracias también, al aporte de Cuex.
Las urgencias no esperan, así que responde teléfono entre un sorbo y otro de café y sigue escudriñando en la memoria. Muchos hoteles desde 1991 en lo adelante tienen marcas de esa relación con Cuba labrada desde entonces, un país que reconoce como un cliente muy exigente. Para Pablo la principal carta de triunfo es la confianza que Cuex se ha ganado de sus contrapartes cubanas. Hoy están implicados en importantes obras en el polo turístico de Guardalavaca y en Varadero con el nuevo Hotel Internacional.
Un café con una empresa que, no solo es cliente de EBM -recién estuvimos a cargo de sus artículos personalizados para la celebración de sus veinticincos- sino con la que compartimos visión y experiencia en Cuba es un lujo. No permite avanzar en el diálogo sin comentar el agradecimiento al equipo EBM que estuvo al tanto de todas las exigencias para que el artículo promocional que hoy tienen y forma parte de su visibilidad en la Feria Internacional de La Habana.
Cuando Pablo responde en ese tono cubano, aunque él sea extranjero, el código común se refuerza
-¿Trabajar en Cuba?
-No es fácil, no es fácil y se ríe, porque a lo cubano sabe que esa frase continúa con “pero tampoco difícil”. No hace falta que la complete, matiza su respuesta con detalles esenciales que hacen que la empresa que representa se consolide en la Isla.
“Es un trabajo de muchos retos, de mucha confianza, romántico…”
-¿Romántico?
“Cuba es… y se deja la frase suspendida en el aire para amoldar las palabras y ser preciso.
“Cuba es Cuba. Es un país muy especial. Mucha gente teme hacer negocios aquí, para nosotros por el contrario, nosotros estamos orgullosos de hacer negocios en Cuba. Estamos muy contentos con lo que hemos logrado y muestra de ese romanticismo son las obras que hemos realizado y que podemos tocar con las manos”.
Cuex estará en la mayor bolsa comercial del país, como habitualmente lo hace, que este año arriba a su edición 35. Nosotros también a través del trabajo en común y, sobre todo, de esa apuesta que nos identifica a partir nuestras respectivas experticias: Cuba.